02/07/2025
Una clase de Bikram Yoga es una experiencia única e inolvidable. Pero, si no tienes en cuenta unas cuantas cosas, puede convertirse en una auténtica pesadilla. A continuación te doy una serie de consejos para que tu clase sea completamente satisfactoria, como debe ser.
- 1. La clase empieza unas cuantas horas antes. Si vas a ir a practicar por la tarde, tenlo en cuenta a la hora de comer: no comas cosas pesadas o te arrepentirás al hacer las posturas, aunque hayan pasado varias horas. Evita los alimentos que provocan digestiones largas, como el ajo, los fritos y las legumbres. Come cosas ligeras y frescas, como ensalada, filete o pollo a la plancha y fruta.
- 2. Bebe mucha agua antes y después de clase. Y por mucha agua me refiero a varios litros. Ya sabes que en clase sudas mucho, así que tienes que reponer para estar bien hidratado. Por otro lado, evita beber alcohol cuando vayas a practicar Bikram Yoga, porque el alcohol te deshidrata.
- 3. Llega con tiempo suficiente a clase. Lo ideal es llegar al estudio diez o quince minutos antes, entrar a la sala y tumbarte para ir acostumbrándote al calor y la humedad. Si llegas tarde o entras en el último minuto te costará más acostumbrarte al calor y coger el ritmo de la clase, relajarte y desconectar.
- 4. Guarda silencio dentro de la sala, es importante. La sala de Bikram Yoga es como un templo, sin que esto tenga nada que ver con la religión. Es el templo del silencio, de la paz, de la relajación. Aquí puedes concentrarte y meditar, cualquier ruido te puede distraer de tu paz interior. Si quieres hablar con tus compañeros de clase o amigos, hazlo fuera de la sala.
- 5. Viste ropa cómoda y ligera, no te empeñes en taparte con prendas holgadas de algodón. Lo mejor es vestir prendas de lycra, cortas y ajustadas. Y no se trata de lucirse sino de estar cómodo, pues con el sudor abundante la ropa puede volverse tu enemiga, molestarte y estorbar. Si tienes algún complejo déjalo en casa, sé práctico y piensa en ti y en tu comodidad.
- 6. Colócate en la sala de manera que puedas verte en el espejo, siempre que sea posible. El espejo es un aliado importante en tu práctica, te permite concentrarte en ti mismo y mejorar más rápidamente. Al principio te costará mirarte al espejo durante noventa minutos. Tu reto es aceptarte como eres, ya verás cómo cada día te gustarás más.
- 7. Deja tus problemas fuera de la sala y trata de concentrarte al máximo en tu práctica. Sigue el diálogo y las instrucciones del profesor, sin quedarte atrás. Cuando todos los alumnos hacen las posturas a la vez, la energía que emana de la armonía y la sincronía repercute positivamente en todos. Si te concentras en las palabras y en ti mismo conseguirás practicar la meditación activa.
- 8. No te seques continuamente el sudor de tu cara ni de ninguna otra parte del cuerpo. El sudor te ayuda a regular la temperatura de la piel, si lo secas lo único que conseguirás es sudar más. Tienes que comprender que el sudor es tu amigo y tu aliado en la clase de Bikram Yoga, debes aprender a convivir con él y a mirarlo de forma positiva. Piérdele el miedo y el asco.
- 9. Trata de entregarte con la máxima intensidad, si haces la clase a medias no le sacarás todo el partido posible. Cada día es diferente y cada clase también, pero intenta siempre esforzarte a tope. Y lo mismo que te entregas al máximo en las posturas debes relajarte al máximo al final, permanece unos minutos respirando para recibir todos los beneficios de la clase.
- 10. Dúchate después de clase, no se trata sólo de higiene, es algo más. Es en la ducha cuando comienzas a sentirte mejor, más descansado y feliz, con más fuerzas y energía. El sudor se ha acumulado sobre tu piel a lo largo de la clase, al ducharte lo eliminas, lo dejas correr con el agua, te limpias y purificas. Sólo quedan en ti los beneficios de la clase, desde los huesos hasta la piel… ¡Aquí nacen las ganas de volver a clase pronto otra vez!